sábado, julio 05, 2003
Leñe con la eñe.
Poca cosa. Que la impotencia y rabia no me deja decir mucho. Habéis visto en que suerte de asquerosidad se ha convertido la "posada" anterior? ¿Qué ocurre con el blog? ¿Es esto una conspiración judeomasonica e imperial contra el idioma español? Vete tu a saber, cosas más raras se han visto. Leñe con la eñe. Coño con ese arácnido moño que trenzamos sobre algunas sílabas para darlas intensidad a la hora de pronunciarlas.
Para que lo que escribo fuera inteligible mil cosas he intentado. Mil cosas han fallado. Ni subterfugios, ni hostias, todo todito todo hecho una mierda y con el pelo alborotado. He escrito directamente en HTML por si el motor de este calvario fuera de una categoría inmediata inferior a la de un triciclo. He editado y vuelto a reeditar por arreglar el vergonzoso estropicio. He jurado y perjurado... Pero ni por esas, colegas. Erre que erre. Es decir: La mierda mientras más mierda mejor mierda.
No paguemos, pues, los de casa por ello. Exímasenos de toda culpa, puesto que no la tenemos. Lo que ocurre lo desconozco. Servidor se dedica a escribir y las amplias cagadas de los demás le traen al fresco. Hombre, por puro sentido de la estética siento no poco enfado, mas que cada uno cargue con su incompetencia y deje de vender lo que ni es pasable ni da resultado.
Misterio no pequeño es el de como quedara este "post"; aunque ya me de igual. Quede como quede así lo dejo, y véanlo los siglos para escarnio de quienes hacen un trabajo tan largo de posibilidades como las mangas de un chaleco... No sigo porque me rechinan los dientes y esa es mala señal.
Si este llega bien, quizá en unas horas os ponga una nueva entrega sobre Darwin, aunque eso suponga, dadas las circustancias, alucinar en colores.
Cuidaros y procurar no mear fuera del tiesto.
AMEN, COÑO, AMEN.